Jóvenes, salud mental y adicciones.

Jóvenes, salud mental y adicciones.

Dianova organizó una mesa redonda virtual sobre estos temas para celebrar el Día Mundial de la Infancia, el 20 de noviembre.

Los efectos de la pandemia en la salud mental de los jóvenes, el abordaje terapéutico, la situación de colectivos más vulnerables y el rol de los consumos de sustancias son algunos de los temas que se debatieron en la mesa redonda organizada el pasado 23 de noviembre. El Día Mundial de la Infancia, que se conmemora cada 20 de noviembre, nos ofrece un punto de partida para llevar a cabo medidas inspiradoras para defender, promover y celebrar los derechos de niños, niñas y jóvenes a través de diálogos y acciones que construirán un mundo mejor. Desde Dianova quisimos aprovechar esta ocasión para visibilizar la situación de la juventud respecto a los cambios sociales, el impacto en la salud mental y la relación con las adicciones con y sin sustancia.

Desde Dianova consideramos que es imposible celebrar este día sin hacer una mención especial a la situación de la infancia en todas las zonas de guerra, en particular en la Franja de Gaza.

Según la ONG Save the Children, unos 6.000 niños y niñas han fallecido en esta guerra hasta la fecha, más que el número total de niños muertos en los otros conflictos en el mundo desde 2019. La infancia nunca debe ser un objetivo de guerra para ninguna de las partes.

Mesa redonda virtual

La mesa de personas expertas abordó los retos a los que se enfrentan los jóvenes con problemas de salud mental en relación con las adicciones, e identificó acciones que deben de ser abordadas.

Para ello, contamos con personas expertas que hablaron desde diferentes perspectivas y partes del mundo: Celia Prat, Coordinadora de programas de la Fad Juventud (España); Patricia Puigdevall – Coordinadora de Novasalud y del área de formación de Dianova Uruguay; Simon Tavera, Presidente, Federación Mexicana de Comunidades Terapéuticas y Xochitl Mejia, Fundadora y Directora Terapéutica del Centro de Desarrollo Humano Tonalli (México). La moderación estuvo a cargo de la Dra. Gisela Hansen de Dianova.

No desestimar el sufrimiento psíquico de los jóvenes

Patricia Puigdevall resaltó la necesidad de trabajar en una escucha real y de tener en consideración la situación en el momento de la persona joven, de validar sus sentimientos y tratar de ver más allá para enmarcarlos y tratarlos debidamente. La juventud es una etapa bastante incomprendida y hay que entenderla como una etapa en sí misma, no como un mero proceso a la edad adulta. Un joven es un joven, y no un mero proyecto de adulto, como muchas veces se les trata desde el punto de vista terapéutico. Por ello, es importante como terapeuta hacer una escucha real de sus auténticas necesidades y no infravalorarlas.

Salud mental de los jóvenes en conflicto con la ley

Simón Tavera se centró en el colectivo de jóvenes en conflicto con la ley ya que es uno de los grupos más vulnerables y complejos de diagnosticar. Este grupo se enfrenta a mayores niveles de agresión y violencia, sufre un mayor déficit cognitivo y se enfrenta a niveles de abandono familiar y exclusión social más elevados.

La persona adolescente que ha cometido un delito no pierde su derecho a la salud y en caso de presentar un problema de consumo de sustancias, debe recibir un tratamiento profesional, con base a evidencia y buenas prácticas, para mitigar las causas, promover la reinserción social y disminuir la posibilidad de la reincidencia.

Para trabajar en temas de salud mental y adicciones, es necesario contar con requerimientos técnicos y normativos sólidos. La privación de libertad debe ir acompañada de un proceso formativo, que fomente los vínculos de la personalidad y el pleno uso de sus capacidades, apostando por una justicia restaurativa.

Evolución de los jóvenes y salud mental

Lamentablemente hoy en día, los jóvenes con problemas de salud mental se enfrentan a mayores niveles de exclusión social, de discriminación y de dificultades educativas. Todos estos son componentes de riesgo en relación con las adicciones.

Celia Prat presentó datos de España que hacen patente la compleja situación a la que se enfrentan los jóvenes. Destaca que haya un elevado porcentaje con depresión, trastorno por ansiedad y el uso de psicofármacos sin prescripción médica. A nivel general, afecta más a las chicas que a los chicos y se observan una peor evolución en datos en la población más joven.

Preocupa y mucho que sólo la mitad de los jóvenes con problemas de salud mental hayan buscado ayuda profesional y que uno de los principales motivos por el que no lo hayan hecho, sea el económico. No se lo pueden permitir. Más preocupante aún es el hecho de que 35 % de los jóvenes con problemas de salud mental no lo hayan comentado con nadie, invisibilizando el problema más si cabe.

Analizar la función de los consumos de sustancias

Xochitl Mejía se centró en la importancia de analizar qué funciones cumplen los consumos de drogas en la situación de los jóvenes. Aquí de nuevo, se trata de hacer una escucha real de lo que esos consumos significan. Los consumos de sustancias entre jóvenes pueden hacerles sentir que se alejan del control de los adultos, darles una mayor sensación de protagonismo, de pertenencia al grupo, tener una mayor sensación de libertad y de invulnerabilidad.

Únicamente castigando y penalizando los consumos no se abordarán los problemas y siendo permisivos con ellos tampoco. Se trata de ver más allá y buscar enfoques efectivos.

El efecto de la pandemia en la salud mental

Indudablemente, la pandemia afectó a la salud mental de los jóvenes. En España, tal y como presentado por Celia Prat, un 30 % de los jóvenes considera que su salud mental ha empeorado en los últimos años, lo que supone un aumento considerable. O como comentó Patricia Puigdevall, los datos del último año en donde se observa un incremento de la intención a quitarse la vida de un 7 % en Uruguay entre jóvenes de 12 a 15 años y un incremento en el abandono de actividades habituales a causa de la tristeza de entre un 8 a un 23 %.

Aún hacen falta más estudios para determinar cómo ha afectado exactamente la pandemia. Sin embargo, un tema que destacaron los participantes de la mesa redonda es que el COVID también ha potenciado casos que ya existían o preexistían. El hecho de que se hayan visibilizado y se les preste más atención en la actualidad también puede verse como una oportunidad para escucharlos y tratarlos.

La prevención como piedra angular de las acciones

Como ante muchas problemáticas, según las voces expertas de la mesa, llegamos tarde para tratar los problemas de salud mental de los jóvenes. Pero hay que tener bien claro que si bien el tratamiento es crucial y necesario, queda un gran trabajo por hacer en el ámbito de la prevención de la salud mental y las adicciones. La prevención debería ser la fuerza motora. Lamentablemente, muchas veces lo urgente (el tratamiento), no permite que se trabaje en lo importante. Como comentaba Xochitl Mejía, la prevención efectiva no “vende” bien.

Además, para que sea efectiva ante esta problemática debería tratarse de intervención comunitaria que se conectase e integrase a diferentes niveles territoriales. En la actualidad, tal y como destaco Simón Tavera, existen muchos servicios públicos y programas sociales, pero éstos no se coordinan en diferentes niveles territoriales. Hay poca conexión entre los individuos y la sociedad. Un mayor trabajo en red y conectividad de los servicios permitiría una mayor integridad en el trabajo con jóvenes con problemas de salud mental. Esta es una apuesta a largo plazo.

Otras posibles acciones palanca para mejorar la situación

Además de las ya mencionadas, en la mesa redonda, se abordaron otras posibles acciones y medidas para reforzar el trabajo de salud mental, jóvenes y adicciones. Destacamos las siguientes:

  • Se deben derrumbar tabúes y desestigmatizar la necesidad de trabajar en el plano de la salud mental.
  • Si bien esta problemática está calando a nivel político, se requiere una mayor inversión para los planes de prevención y tratamiento.
  • Garantizar recursos de apoyo que sean accesibles y asequibles. Hay que eliminar la burocracia que aleja a potenciales usuarios de los servicios.
  • Formación de los profesionales que traten con jóvenes y en especial a los docentes en detección precoz, variables de género, etc.
  • Capacitar a las familias en el abordaje de esta problemática y proporcionarles mayores recursos.
  • Fomentar la educación emocional, afectiva y sexual.
  • Reforzar la evidencia y datos en este ámbito. Contar con observatorios de salud mental.

Como se puede constatar, las adicciones con y sin sustancia no relucieron como un tema central de la mesa redonda, sino más bien como una causa o consecuencia. Ante el colectivo de jóvenes con problemas de salud mental es prioritario generar competencias y bienestar y no trabajar solo desde el problema de las sustancias, sino más bien en los recursos que estamos generando para contrarrestarlos.

Desde Dianova queremos agradecer a las personas que participaron en la mesa redonda por compartir con nosotros su tiempo y conocimiento. Esperamos que la conversación haya sido de su interés y que haya despertado tantas inquietudes como a nosotras!

 

Las personas que utilizan drogas y la salud mental

Las personas que utilizan drogas y la salud mental

El CSFD está formado por 45 organizaciones de la sociedad civil de toda Europa que representan diferentes ámbitos de la política de drogas y diversas posturas dentro de los mismos. Su objetivo es proporcionar una amplia plataforma para un diálogo estructurado entre la Comisión y la sociedad civil europea que apoye la formulación y aplicación de la política en materia de drogas mediante un asesoramiento práctico. El CSFD acoge con satisfacción la inclusión de los problemas a los que se enfrentan las personas que consumen drogas, incluidos los problemas de salud mental, en la agenda política, ya que se trata de un tema que requiere una atención urgente y que hasta ahora se ha pasado por alto.

Contexto

Las complejidades de la relación entre los trastornos mentales y los daños relacionados con las drogas son evidentes. Los factores determinantes de los trastornos mentales incluyen la desigualdad, la marginación, la discriminación, la estigmatización, la violencia, la falta de vivienda y las experiencias infantiles adversas, y existen en niveles sociales, económicos y comerciales muy amplios. Las personas que utilizan drogas suelen ser ya vulnerables a estos factores debido a su consumo de drogas.

Además, tanto los daños relacionados con las drogas como las enfermedades mentales afectan de forma desproporcionada a las comunidades estigmatizadas y marginadas. Las mujeres se presentan a los servicios con problemas de salud mental más graves que los hombres, que se han desarrollado a lo largo de períodos más cortos de drogodependencia. Los jóvenes pueden recurrir a las sustancias como automedicación, en un intento de aliviar la ansiedad, la depresión y otros problemas relacionados con la angustia juvenil, que pueden desembocar en graves problemas de salud mental si no se abordan con prontitud. Sin embargo, estas dos subpoblaciones tienen un acceso desigual a servicios específicos adaptados a sus necesidades. Además, las minorías étnicas y los grupos indígenas, que ya sufren múltiples vulnerabilidades interrelacionadas y se ven afectados de forma desproporcionada por los esfuerzos de control de drogas, también suelen quedar excluidos de los sistemas actuales de prestación de servicios.

Terminología/conceptualización

El término «patología dual» se utiliza a menudo en el contexto de las personas con un trastorno mental que consumen drogas e implica una enfermedad con una causa biológica conocida. Las condiciones de salud mental pueden estar determinadas por la interacción entre un individuo y su entorno social y no necesariamente por su bioquímica cerebral. El uso del término «patología» promueve un enfoque predominantemente farmacológico y puede conducir a una mayor (sobre)medicalización. Por su parte, el término «comorbilidad» describe la coexistencia de dos enfermedades (en este contexto, una enfermedad mental y el consumo de sustancias). Los miembros del CSFD están de acuerdo en que el término «comorbilidad» debería utilizarse en lugar de «patología dual», ya que pone de relieve la complejidad de la relación entre ambas afecciones y promueve un enfoque más integrado, holístico y centrado en la persona. También subraya que la dependencia y el consumo de drogas de alto riesgo no siempre están asociados a problemas de salud mental.

Relaciones complejas

Debido a la complicada relación entre los trastornos mentales y el consumo de drogas, a menudo es difícil detectar si los problemas mentales se desencadenaron por el consumo continuado de sustancias (alcohol incluido) o bien, como se señala cada vez con mayor frecuencia, si el consumo de drogas o incluso la dependencia tienen su origen en un malestar emocional y una vulnerabilidad psicológica preexistentes. Las personas con comorbilidades requieren acceso a intervenciones de alta calidad debido a la complejidad y la interseccionalidad de los problemas que experimentan y los riesgos a los que se enfrentan. Al mismo tiempo, a menudo las personas con comorbilidades reciben un diagnóstico erróneo y una atención médica inadecuada o insuficiente. Un diagnóstico adecuado es crucial para desarrollar un plan de tratamiento individual, ajustado a las necesidades de cada persona. El tratamiento de las comorbilidades debe ser integral, adaptado a las características del individuo (perfil, necesidades y expectativas, interacción con su comunidad, entorno, etc.) y fundamentado en una perspectiva interseccional, sensible al género y basada en los derechos humanos.

Un enfoque centrado en la persona es particularmente importante dadas las necesidades específicas de los individuos que experimentan esta comorbilidad y que también forman parte de los grupos vulnerables mencionados anteriormente. La OMS informa de un aumento de las tasas de adolescentes que presentan mala salud mental o trastornos mentales. En todo el mundo, uno de cada siete jóvenes de 10 a 19 años padece un trastorno de salud mental, mientras que el suicidio es la cuarta causa de muerte entre los jóvenes de 15 a 29 años. Este deterioro de la salud mental puede conducir a un mayor riesgo de desarrollar una comorbilidad más adelante en la vida, por lo que es esencial garantizar una atención adecuada a los jóvenes que puedan estar en riesgo de desarrollar una comorbilidad.

Obstáculos a la atención

El sistema actual de atención a la salud mental da prioridad a las grandes instituciones de salud mental especializadas y promueve la atención hospitalaria como método principal de intervención. En los métodos de tratamiento suele predominar el enfoque farmacológico. Muchos países de la UE muestran una financiación insuficiente de los servicios de salud mental y una distribución ineficaz y sesgada de los recursos disponibles dentro del sistema.

A menudo se pasan por alto las opciones basadas en la comunidad para la prestación de servicios. La falta de recursos y la presión sobre el sistema conducen a una aplicación insuficiente de enfoques integrados y centrados en la persona. Esto es especialmente evidente en el contexto del tratamiento con agonistas opiáceos (TAO). Aunque se ha demostrado que los programas de TAO son eficaces en todo el mundo, algunos criterios de elegibilidad pueden ser extremadamente difíciles de cumplir, lo que crea barreras para la permanencia en el programa para las personas que consumen opiáceos y sufren problemas de salud mental. Además, los clientes de los programas de TAO tienen dificultades considerables para acceder al tratamiento en un pabellón psiquiátrico, por ejemplo, si su estado requiere estabilización en un área de salud mental distinta de la drogodependencia, es decir, depresión, psicosis, etc. La falta de recursos puede hacer que incluso los centros equipados para tratar comorbilidades tengan dificultades para administrar el TAO.

Recomendaciones

  • Garantizar la disponibilidad de servicios de salud mental para las personas que consumen drogas no sólo en el contexto del tratamiento de la drogodependencia. En particular, mantenerse alerta ante el riesgo de sobremedicalización de las personas con comorbilidades.
  • Mejorar la accesibilidad de la atención mediante el desarrollo de opciones de servicios ambulatorios basados en la comunidad, que ofrezcan servicios de atención a la salud mental y al consumo de sustancias a nivel de atención primaria.
  • Dada la naturaleza biopsicosocial de las comorbilidades de la salud mental y el consumo de sustancias, los enfoques para abordarlas deben ser polifacéticos e incluir no sólo medidas médicas y psiquiátricas, sino también intervenciones sociales, familiares y comunitarias. De ahí que la medicación deba ir acompañada de otras estrategias terapéuticas basadas en el componente «psicosocial».
  • Debe garantizarse la continuidad de la atención ampliando los servicios de reinserción mediante la creación de oportunidades de reinserción social y profesional, a través de centros de día y servicios de seguimiento psicosocial, con el fin de proporcionar a las personas las herramientas que necesitan cuando acaban el programa de tratamiento.
  • Las autoridades públicas deben garantizar la sostenibilidad a largo plazo de los servicios de reinserción, en particular en el sector residencial, en contra de los actuales incidentes crecientes de infrafinanciación.
  • Es vital invertir en servicios, investigación e innovación en el ámbito de la salud mental y el consumo de drogas, así como en la reducción de daños, la prevención, el tratamiento y la recuperación dentro de un enfoque biopsicosocial. Es esencial apoyar el desarrollo de programas específicos dentro de los servicios de drogodependencia e incluir una perspectiva interseccional y de género.
  • Debe garantizarse un seguimiento y evaluación continuos de la eficacia de las intervenciones.
  • Deben utilizarse técnicas basadas en la evidencia, evitando la sobremedicalización y promoviendo el entrenamiento y la educación en habilidades individuales y mecanismos de afrontamiento que aumenten el nivel de autonomía de las personas.
  • Las autoridades públicas también deben garantizar que el deterioro de la salud mental entre los jóvenes se aborde de forma prioritaria para disminuir el riesgo de desarrollo de comorbilidades en etapas posteriores de la vida.
  • Revisión de los planes de estudios de los especialistas en servicios de salud mental y consumo de sustancias para garantizar la inclusión de perspectivas centradas en la persona y de género.
  • Deben fomentarse los enfoques biopsicosociales centrados en la persona (incluida la minimización de la sobremedicalización) mediante la formación y el establecimiento de equipos multidisciplinares capaces de abordar diversos problemas.
  • Deben desarrollarse campañas de sensibilización para reducir la estigmatización y mejorar los conocimientos sanitarios.

 

Salud mental en Chile: un enfoque preventivo.

Salud mental en Chile: un enfoque preventivo.

Es imperativo identificar y comprender los factores de riesgo que influyen en el bienestar psicológico de la población – el ejemplo de Chile.

Chile, un país de diversidad geográfica, cultural y social, enfrenta desafíos significativos en el ámbito de la salud mental. En el marco de transformaciones sociales, históricas y ambientales, es imperativo identificar y comprender los factores de riesgo que influyen en el bienestar psicológico de la población. Desde las desigualdades socioeconómicas hasta las presiones culturales modernas, estos elementos configuran el panorama de la salud mental en el país. Abordar estos factores desde una perspectiva preventiva no solo es una necesidad, sino también un compromiso ético y social. En este artículo, exploraremos en profundidad estos riesgos y reflexionaremos sobre posibles estrategias preventivas para construir un Chile más resiliente y mentalmente saludable.

Los factores de riesgo
 Desigualdades socioeconómicas: Las marcadas diferencias socioeconómicas, la inequidad para acceder a servicios educacionales y de salud, el importante nivel de endeudamiento de los hogares chilenos, son algunos de los factores que influyen en generar situaciones de estrés, desesperanza y frustración, afectando principalmente, la salud mental de quienes enfrentan condiciones de vida más desfavorables.
 Estigma social: A pesar de los avances en la comprensión de los trastornos mentales, todavía persisten prejuicios y estigmatización hacia las personas con problemas de salud mental en Chile. En este sentido, un fenómeno preocupante, tiene que ver con el desestimo de las emocionalidades. Así como la academia y el mundo profesional ligado a la salud mental, avanzan en instalar en la sociedad chilena una mirada comprensiva del ámbito emocional, otras voces avanzan en retomar procesos de crianza basados en las normas y reglas, avalando la violencia cómo mecanismo de crianza y relativizando e incluso ridiculizando, los temas asociados a emocionalidad sana.
 Traumas históricos y recientes: Eventos traumáticos como la dictadura y las recientes movilizaciones sociales pueden generar un impacto emocional en diversas generaciones, dando lugar a trastornos de estrés postraumático, entre otros.
 Falta de acceso a atención especializada: El acceso limitado o tardío a servicios de salud mental puede empeorar los síntomas y complicar la recuperación.
 Consumo de sustancias: El consumo excesivo de alcohol, tabaco y otras drogas se relaciona con problemas de salud mental y puede ser tanto un síntoma como un factor de riesgo.
 Factores ambientales: La urbanización acelerada, el ruido, la contaminación y la falta de espacios verdes en algunas zonas pueden influir negativamente en el bienestar psicológico.
 Desempleo y precariedad laboral: La falta de empleo o la inestabilidad laboral pueden generar estrés, ansiedad y otros problemas relacionados.
 Acontecimientos vitales negativos: Situaciones como la pérdida de seres queridos, enfermedades graves o experiencias traumáticas pueden aumentar el riesgo de problemas de salud mental.
 Antecedentes familiares: La presencia de trastornos mentales en la familia puede aumentar el riesgo de desarrollar problemas similares.
 Presión social y expectativas culturales: La presión por cumplir con roles y expectativas sociales, así como la comparación constante en un mundo digitalizado, pueden generar ansiedad y afectar la autoestima. En este sentido el rol de las redes sociales, la instalación de cánones de belleza, de éxito, de riqueza y felicidad, influyen en sensaciones de insatisfacción permanente.
 Desastres naturales: Chile, por su geografía, es susceptible a desastres naturales como terremotos, tsunamis y erupciones volcánicas, además de desastres relacionados al clima, cómo incendios forestales de gran magnitud en verano o periodos de inundaciones en invierno. Estos eventos pueden tener un impacto profundo en la salud mental de las comunidades afectadas y en la sensación de peligro permanente que se instala en la idiosincrasia nacional.

Reconocer estos factores de riesgo es esencial para desarrollar estrategias preventivas eficaces en salud mental. En Chile, se necesita un enfoque integral que aborde estos desafíos desde múltiples perspectivas, promoviendo la resiliencia y el apoyo comunitario y garantizando el acceso a servicios de salud mental de calidad. Los factores de riesgo que se presentan son variados y de una complejidad de difícil abordaje, por lo que generar estrategias preventivas eficaces en salud mental es un desafío de envergadura. Existe la necesidad de instalar el tema cómo prioritario, donde el desafío más importante, es cómo los organismos técnico competentes, influyen en una gran política pública de abordaje de la salud mental.

Perspectivas y propuestas de la Sociedad Académica y Sociedad Civil desde un enfoque preventivo.

La salud mental con enfoque preventivo ha ganado reconocimiento y relevancia en las últimas décadas, y tanto la sociedad académica como la sociedad civil han planteado diversas perspectivas y propuestas en este ámbito. A continuación, se exponen las principales posturas y recomendaciones de ambas:

Sociedad Académica:
 Investigación: Se subraya la importancia de la investigación constante para identificar factores de riesgo y de protección asociados a trastornos mentales. Estos estudios proporcionan una base científica para las intervenciones preventivas.
 Educación temprana: Se promueve la integración de programas de salud mental en los currículos educativos desde edades tempranas, enseñando habilidades socioemocionales, resolución de conflictos y manejo del estrés.
 Capacitación profesional: Se destaca la necesidad de capacitar a profesionales de la salud, educación y otros sectores relacionados en la detección temprana de signos de trastornos mentales y en la intervención oportuna.
 Intervenciones basadas en evidencia: Se promueve el uso de intervenciones preventivas que hayan demostrado eficacia en estudios científicos.
 Políticas públicas: Se insta a los gobiernos a desarrollar y fortalecer políticas públicas centradas en la prevención en salud mental, basadas en datos empíricos.

Sociedad Civil:
 Accesibilidad: La sociedad civil aboga por garantizar el acceso universal a programas y servicios de prevención y atención en salud mental, sin importar el estatus socioeconómico.
 Desestigmatización: Se enfatiza en la importancia de erradicar el estigma asociado a los trastornos mentales, promoviendo la conciencia y la educación en este ámbito.
 Participación comunitaria: Se reconoce el papel central de la comunidad en la prevención, promoviendo la creación de redes de apoyo y espacios seguros para el diálogo y la expresión.
 Derechos humanos: Se subraya que la prevención y atención en salud mental es un derecho humano fundamental, y se exige el respeto y garantía de este derecho.
 Información y recursos: Desde organizaciones no gubernamentales y grupos comunitarios, se trabaja en proporcionar información, recursos y herramientas a la población para promover la salud mental.

Conclusión
Tanto la sociedad académica como la civil coinciden en que la prevención es un pilar fundamental en la promoción de la salud mental. Mientras la academia se enfoca en la investigación, la formación y la evidencia, la sociedad civil pone énfasis en los derechos, el acceso y la participación comunitaria. Ambas perspectivas son esenciales para una estrategia integral y eficaz en salud mental preventiva. La capacidad de construir un sistema integral potente e influyente en la visión de la ciudadanía, sostenido en una Política Pública de calidad, que facilite un proceso de cambio de paradigma con mirada de mediano y largo plazo, serán los entes centrales, para llevar adelante un proceso virtuoso de cambio y mejora.

Autores

Davide Brundu: Director Ejecutivo Dianova Chile-Nova Salud SA Bienestar-Salud Mental- Adicciones

Rodrigo Sanhueza Rojas: Director de Programas Dianova Chile

 

Informe Europeo sobre Drogas – En Todas partes, en Todo

Informe Europeo sobre Drogas – En Todas partes, en Todo

La agencia de la UE en materia de drogas, el Observatorio Europeo de las Drogas y las Toxicomanías (OEDT), recopila y analiza anualmente los datos enviados por los Estados miembros de la UE, Turquía y Noruega para elaborar el Informe Europeo sobre Drogas. Este artículo presenta algunos extractos del informe que consideramos especialmente relevantes para el ámbito de trabajo de Dianova. El informe completo está disponible aquí.

Uno de los mensajes clave del informe es que el impacto del consumo de drogas ilegales se percibe actualmente en casi toda nuestra sociedad. Casi todo lo que tiene propiedades psicoactivas puede ser utilizado como droga. Esto significa que todo el mundo, directa o indirectamente, puede verse afectado por el consumo de drogas ilegales y los problemas asociados al mismo.

Extractos del informe del OEDT:

En todas partes

Hoy en día, los problemas relacionados con las drogas repercuten en casi todas partes. En el ámbito nacional, se manifiestan y agravan otros problemas políticos complejos, como la falta de vivienda, la gestión de los trastornos psiquiátricos y la delincuencia juvenil. También estamos observando mayores niveles de violencia y corrupción impulsados por el mercado de la droga en algunos países. A escala internacional, los problemas de la droga están creciendo en muchos países de renta baja y media, socavando la gobernanza y el desarrollo y sumándose a los ya considerables retos de salud pública y seguridad a los que se enfrentan muchos países.

En todo

Cada vez más observamos que en el mercado de las drogas puede aparecer casi cualquier sustancia con propiedades psicoactivas, a menudo mal etiquetada o en mezclas, con lo que los consumidores pueden no ser conscientes de lo que están consumiendo, lo que aumenta los riesgos para la salud y crea nuevos retos para la aplicación de la ley y la regulación.

Todo el mundo

El impacto de los acontecimientos que estamos presenciando significa que todo el mundo puede verse afectado de alguna manera por el consumo de drogas ilegales, el funcionamiento del mercado de las drogas y los problemas asociados al mismo. Directamente, lo vemos en quienes desarrollan problemas y necesitan tratamiento u otros servicios. Indirectamente, lo vemos en el reclutamiento de jóvenes vulnerables para la delincuencia, la presión sobre los presupuestos sanitarios y los costes sociales para las comunidades que se sienten inseguras o donde las instituciones o las empresas se ven socavadas por la corrupción o las prácticas delictivas.

La mayor diversidad en la disponibilidad y el consumo de drogas está creando nuevos retos sanitarios y políticos

La elevada disponibilidad de drogas ha ido acompañada de una mayor diversidad de sustancias en el mercado de drogas ilícitas, exponiendo a los consumidores a una gama más amplia de sustancias psicoactivas. Entre ellas se encuentran las nuevas drogas sintéticas, cuyos riesgos para la salud suelen conocerse poco. Esto suscita preocupación por la posibilidad de que aumente el consumo de sustancias ilícitas en general y los riesgos asociados a algunas de ellas. Las personas que consumen drogas pueden correr un mayor riesgo de sufrir efectos nocivos para la salud, incluidas intoxicaciones y muertes, al consumir, posiblemente sin saberlo, sustancias de mayor potencia o más novedosas, o mezclas de sustancias en las que las interacciones entre las drogas pueden aumentar los daños potenciales para la salud.

Las respuestas coordinadas y basadas en pruebas pueden funcionar, pero a menudo no están suficientemente disponibles

Aunque siguen existiendo importantes lagunas de conocimiento, la investigación y la inversión en el desarrollo de servicios significa que, en los ámbitos de la prevención del consumo de drogas, el tratamiento, la reducción de daños y el apoyo a la recuperación, ahora comprendemos mejor qué intervenciones tienen más probabilidades de ser eficaces. La naturaleza interrelacionada de los problemas asociados al consumo de drogas y otras cuestiones complejas de política social también significa que hay un mayor reconocimiento de la necesidad de respuestas más integradas y globales. Por lo tanto, se necesitan sinergias con la política y la práctica en otros ámbitos importantes, como el apoyo a la vivienda, la asistencia sanitaria genérica, los servicios para jóvenes y ancianos, la prestación de servicios de salud mental y el sistema de justicia penal. Sin embargo, tanto la disponibilidad de respuestas específicas a las drogas como los ejemplos de modelos de atención integrados y bien desarrollados son muy heterogéneos a escala europea y, en muchos países, es necesario invertir más en ambos ámbitos.

Creciente apoyo a la aplicación de medidas de prevención del consumo de sustancias basadas en pruebas

La prevención del consumo de sustancias pretende detener o retrasar el consumo de drogas psicoactivas. También puede ayudar a quienes han empezado a consumir sustancias a evitar el desarrollo de trastornos por consumo de drogas. Sin embargo, históricamente no todos los enfoques utilizados en este ámbito han resultado eficaces, y el interés por la identificación y aplicación de programas de prevención basados en pruebas ha ido en aumento. La consecución de este objetivo se apoya actualmente en la creación de registros de programas de prevención, iniciativas de formación y el desarrollo de normas de calidad. El Plan Europeo de Prevención está diseñado para mejorar la eficacia general de los esfuerzos de prevención. Más de 25 Estados miembros de la UE y países vecinos cuentan ya con formadores nacionales del Currículo Europeo de Prevención. Los esfuerzos de prevención también cuentan con el apoyo de Xchange, un registro europeo en línea de intervenciones de prevención evaluadas.
Hay que seguir reforzando la prestación de servicios de reducción de daños

El consumo de drogas ilícitas causa una serie de daños agudos y crónicos y es un factor reconocido de la carga mundial de morbilidad. Las respuestas relacionadas con la reducción de daños, como el tratamiento con agonistas opioides y el suministro de material estéril a las personas que se inyectan drogas, están ahora ampliamente aceptadas como una importante contribución a la prestación de asistencia sanitaria. Sin embargo, la cobertura y el acceso a este tipo de intervenciones siguen siendo insuficientes en algunos Estados miembros de la UE en comparación con las necesidades estimadas. Algunos países también han invertido en servicios más nuevos, como salas de consumo de drogas, programas de naloxona para llevar a casa e instalaciones de control de drogas. La disponibilidad de estos servicios sigue siendo más limitada. Además, suele haber menos consenso entre los países sobre hasta qué punto estas medidas son respuestas adecuadas. Por lo tanto, es necesario realizar más estudios de investigación y evaluación para reforzar la base empírica necesaria para fundamentar las deliberaciones políticas en este ámbito.

Se necesita apoyo multidisciplinar para tratar a una cohorte de consumidores de opioides que envejece

Las estimaciones actuales sugieren que aproximadamente la mitad de las personas con un consumo de opioides de alto riesgo en la Unión Europea en 2021, unas 511 000 (524 000 incluyendo Noruega y Turquía), recibieron tratamiento con agonistas opioides. Las pruebas disponibles apoyan el tratamiento con agonistas opioides, con la observación de resultados sanitarios y sociales positivos, incluyendo una reducción del riesgo de mortalidad. Sin embargo, más del 60 % de los pacientes en tratamiento con agonistas opioides tienen ahora 40 años o más, mientras que menos del 10 % son menores de 30 años. Esto significa que los servicios tienen que abordar un conjunto más complejo de necesidades sanitarias en una población cada vez más vulnerable. Se necesitan vías de derivación eficaces a servicios más genéricos que ofrezcan tratamiento para las afecciones asociadas al proceso de envejecimiento. El tratamiento de este grupo, a menudo muy marginado, también debe responder a un complejo conjunto de problemas relacionados, no sólo con su consumo de drogas, sino también con cuestiones de salud mental, aislamiento social, empleo y vivienda. Por lo tanto, es necesario hacer mayor hincapié en el establecimiento de asociaciones eficaces entre múltiples organismos y los servicios genéricos de apoyo sanitario y social.

 

Día de sensibilización sobre las sobredosis

Día de sensibilización sobre las sobredosis

Lanzado inicialmente en Australia en 2001, el Día Internacional de Concienciación sobre las Sobredosis es hoy la mayor campaña de este tipo. El objetivo de la campaña es combatir el fenómeno de las sobredosis, recordar a los que se han ido, sin estigmatizarlos en modo alguno, y reconocer el dolor de los que se quedan, ya sean familiares o amigos.

La campaña, promovida en el sitio web https://www.overdoseday.com, también pretende sensibilizar al público en general sobre el fenómeno de las sobredosis, una de las crisis de salud pública más flagrantes, y estimular la acción y el debate sobre herramientas de prevención de sobredosis y políticas de drogas validadas científicamente.

Desde 2012, el Día Internacional de Concienciación sobre las Sobredosis (Overdose Awareness Day, or IOAD) está organizado por la organización australiana de salud pública sin ánimo de lucro Penington Institute. El Instituto se dedica a promover estrategias eficaces, formar a trabajadores de primera línea y organizar actividades de sensibilización en estos ámbitos.

Texto adaptado del sitio web https://www.overdoseday.com (haga clic para obtener más información y consultar el mapa de los eventos organizados en todo el mundo)

Una crisis mundial

Las sobredosis de drogas representan una crisis internacional. En los últimos veinte años, el número de muertes por sobredosis ha aumentado considerablemente en todo el mundo. Cada año se registra un número récord de muertes, debidas principalmente al consumo de opioides, a menudo en combinación con otras drogas como las benzodiacepinas, los estimulantes y el alcohol.

En 2020, se calcula que 284 millones de personas – o una de cada 18 personas de entre 15 y 64 años – consumieron una o más drogas en los últimos 12 meses, lo que supone un aumento del 26 % en comparación con 2010. Los opioides son responsables de dos tercios (69 %) de las muertes por sobredosis. Se calcula que el número de personas que consumen opioides en todo el mundo ha aumentado de 26 a 36 millones en 2010 a 61,3 millones en 2020. Las epidemias de sobredosis de opiáceos están causando estragos actualmente en distintas partes del mundo. Una de ellas está vinculada esencialmente a la amplia disponibilidad de fentanilo, un opioide sintético especialmente potente, en Estados Unidos y Canadá.
Además, desde principios de los años 2000, una nueva droga se ha extendido a los principales escenarios de la droga en Estados Unidos: la xilacina o «tranq». Apodada «droga zombi» o «droga carnívora» por sus efectos y consecuencias para los consumidores, este sedante veterinario se mezcla con fentanilo, lo que aumenta tanto sus efectos como sus riesgos, hasta el punto de que la administración estadounidense declaró el pasado mes de abril que el fentanilo cortado con xilacina representaba ahora una amenaza para el país.

La otra epidemia de sobredosis se produce principalmente en el norte de África, África Occidental, Oriente Próximo y Oriente Medio y el sudoeste asiático, y está asociada al uso no médico de otro opioide sintético. Esta epidemia no aparece en los titulares y recibe relativamente poca atención de los medios de comunicación. El culpable no es la heroína cortada con fentanilo, ni siquiera la hidrocodona o la oxicodona, sino un analgésico mucho menos potente: el tramadol. Este opioide de venta con receta no sólo es barato, sino también fácil de conseguir, lo que lo convierte en la droga preferida de los jóvenes.

Prevenir las sobredosis es posible

Todas las sobredosis se pueden prevenir. Existen estrategias prácticas para revertir y prevenir las sobredosis y reducir los daños asociados al consumo problemático de drogas. Uno de los objetivos del Día Internacional de Concienciación sobre las Sobredosis es dar a conocer las estrategias y herramientas basadas en pruebas que pueden ayudar a prevenir las sobredosis, es decir, a evitar los daños y las muertes por sobredosis.

Para dar una respuesta eficaz a la actual epidemia mundial, es necesario que confluyan varios factores. Entre ellos se encuentran la activación de las comunidades para concienciar y abogar por el cambio, la generación de ideas y conocimientos escuchando a quienes han vivido experiencias de sobredosis y a las personas que consumen drogas, el uso de soluciones culturalmente apropiadas, y mucho más.

La sobredosis es un problema complejo que implica estigmatización, discriminación y diversos malentendidos sobre las drogas y las personas que las consumen. Muchas personas de nuestras comunidades han sido mal informadas o nunca han sido informadas sobre los riesgos asociados al consumo de drogas, incluidos el alcohol y los fármacos. Por lo tanto, nuestra respuesta colectiva a la prevención de las sobredosis requiere una respuesta integral por parte de los gobiernos, las organizaciones dentro y fuera de los sectores sanitarios, y una comunidad más empática e informada.

Fuentes:

Penington Institute (2022). Global Overdose Snapshot
UNODC (2022). World Drug Report 2022

 

Mujeres y adicción: ChatGPT muestra el camino

Mujeres y adicción: ChatGPT muestra el camino

En el marco de la campaña «El acceso al alcance de todas«, pedimos a ChatGPT que arrojara algo de luz sobre la cuestión del acceso de las mujeres a los servicios de tratamiento de las adicciones. La respuesta de la IA muestra un excelente dominio del tema, demostrando que se trata de un problema ampliamente reconocido y documentado, prueba, si es que hacía alguna falta, de que es hora de actuar para encontrar soluciones.

Nuestra pregunta:

¿Qué puede decirme sobre las barreras a las que se enfrentan las mujeres cuando intentan acceder a programas de tratamiento de las adicciones?

Respuesta de ChatGPT:

Las mujeres se enfrentan a varias barreras cuando intentan acceder a programas de tratamiento de adicciones. Estos son algunos de los retos más comunes con los que se pueden encontrar:

  • Estigma y expectativas sociales: Las mujeres que luchan contra la adicción pueden enfrentarse a un importante estigma, juicio y presión social. El miedo a ser etiquetada como «mala madre» o a experimentar la desaprobación social puede impedir que las mujeres busquen tratamiento. La sociedad a menudo pone mayores expectativas en las mujeres en términos de cuidado y mantenimiento de los roles familiares, lo que puede hacer que sea más difícil para ellas dar prioridad a su propia recuperación.
  • Falta de programas específicos de género: Muchos programas de tratamiento de la adicción se han diseñado históricamente centrándose en los hombres, olvidando a menudo las necesidades y experiencias únicas de las mujeres. Los programas específicos de género que abordan los factores físicos, psicológicos y sociales específicos que afectan a las mujeres son cruciales, pero su disponibilidad puede ser limitada.
  • Responsabilidades del cuidado de los hijos/as: Las mujeres, especialmente las que tienen hijos/as, pueden tener dificultades para acceder al tratamiento debido a sus responsabilidades en el cuidado de la infancia. Encontrar opciones fiables y asequibles para el cuidado de los niños y niñas mientras asisten a las sesiones de tratamiento puede ser un obstáculo importante para las mujeres que buscan ayuda.
  • Limitaciones económicas: Los factores económicos pueden crear barreras al tratamiento para las mujeres. Los recursos financieros limitados, la falta de cobertura de seguro médico y las preocupaciones sobre la seguridad laboral pueden impedir que las mujeres accedan a programas de tratamiento de adicciones o dificultar su capacidad para comprometerse con un tratamiento a largo plazo.
  • Trastornos mentales concurrentes: Las mujeres con adicción suelen padecer trastornos de salud mental concurrentes, como ansiedad, depresión o problemas relacionados con traumas. La presencia de estas condiciones subyacentes puede hacer que sea más difícil acceder a servicios de tratamiento adecuados que aborden tanto la adicción como las necesidades de salud mental.
  • Conocimiento e información limitados: Algunas mujeres pueden no conocer las opciones de tratamiento disponibles o tener un acceso limitado a la información sobre adicción y recursos de recuperación. Esta falta de conocimiento puede impedir su capacidad para buscar ayuda o tomar decisiones informadas sobre su camino al tratamiento.
  • Factores culturales y sistémicos: Las creencias culturales, las normas sociales y los factores sistémicos pueden influir en la voluntad y la capacidad de las mujeres para buscar tratamiento de la adicción. Factores como la discriminación, los estigmas culturales, las barreras lingüísticas y la escasa representación de mujeres diversas en los entornos de tratamiento pueden crear obstáculos adicionales.

    Es importante hacer frente a estas barreras y ofrecer programas de tratamiento de las adicciones que tengan en cuenta la perspectiva de género y sean integradores, teniendo en cuenta las necesidades y los retos específicos a los que se enfrentan las mujeres. Al derribar estas barreras, las mujeres pueden tener un mejor acceso a un tratamiento eficaz, al apoyo y a los recursos de recuperación.

Salud mental en acción.

Salud mental en acción.

La campaña de nuestros colegas de Dianova Uruguay ya está en el aire.

La campaña vehiculizada a través de los soportes publicitarios de Movimagen en Montevideo e interior del país, tiene como objetivo visibilizar, sensibilizar y normalizar la problemática de la salud mental, entendiendo por salud mental: “El estado de equilibrio que debe existir entre las personas y el entorno socio-cultural que los rodea, incluye el bienestar emocional, psíquico y social e influye en cómo piensa, siente, actúa y reacciona una persona ante momentos de estrés”.

La gráfica de la campaña representa el encuentro de personas con pensamientos confusos y adultos en la que se produce un cambio en la situación a partir de una interacción entre ambos.

El acercamiento puede haber sido propuesto por cualquiera de las partes con intención de favorecer la escucha, el diálogo y acompañamiento. Estas personas pueden ser familiares, amigos, referentes socio afectivos y/o agentes de salud, en los que se da un acto de encuentro positivo para ambas partes.

Existe un mensaje de promoción a la apertura de uno mismo y a la expresión del sentir desde una mirada optimista, desde lo psicológico y emocional, a la escucha y a la aceptación, al apoyo y al acompañamiento, a la acción, como elemento central en cualquiera de los protagonistas y la convocatoria a la acción sobre el tema de salud mental.

Plantear desde una mirada optimista es aceptar la vida en su globalidad y reconocer que cada experiencia vital, cada atisbo de realidad, sea como sea, encierra una posibilidad ilimitada de crecimiento.

Slogan: Salud mental en acción

Hashtag: #saludmentalenacción

Mensaje: Cuida tu mente – Nutre tu bienestar – Encuentra tu equilibrio

www.dianovauruguay.org

Las ilustraciones son creación de la artista nacional Agostina Ravera:

https://www.artstation.com/agostinaravera

 

La situación del tratamiento de la drogodependencia en el mundo

La situación del tratamiento de la drogodependencia en el mundo

El Informe Mundial sobre las Drogas hace hincapié en la situación de las personas con trastornos de uso de sustancias y de los servicios de tratamiento.

Cada año, el Informe Mundial sobre las Drogas proporciona los datos más recientes acerca de las estimaciones y tendencias a nivel global y subregional en cuanto a la demanda y oferta de drogas. No obstante, su relevancia va más allá de la mera recopilación de datos, ya que también engloba conclusiones e implicaciones políticas, análisis exhaustivos de los principales sucesos y tendencias en desarrollo, así como temas de actualidad vinculados al ámbito de las drogas.

Informe mundial sobre drogas 2023

Dianova ha decidido poner el foco sobre algunos de los aspectos destacados en el informe 2023 que se vinculan directamente con la situación de las personas en tratamiento por trastornos de uso de drogas y la prestación de servicios de tratamiento, con el fin de tener una visión más amplia de la realidad en este ámbito. A continuación encontrará textos que proceden directamente del informe (traducido del inglés)

Panorama de las drogas, los trastornos por uso de drogas y el tratamiento

El consumo de drogas sigue siendo elevado en todo el mundo. En 2021, 1 de cada 17 personas de entre 15 y 64 años en el mundo había consumido alguna droga en los últimos 12 meses (lo que representa el 5,8% de la población mundial de entre 15 y 64 años). El número estimado de consumidores aumentó un 23% de 2011 a 2021, en parte debido al crecimiento de la población. Se estima que 39,5 millones de personas en todo el mundo sufrían trastornos por consumo de drogas en 2021, lo que supone un aumento con respecto a años anteriores. Solo 1 de cada 5 personas con trastornos por consumo de drogas recibía un tratamiento.

Las distintas drogas suponen cargas diferentes para la salud y los sistemas sanitarios. La mayoría de los trastornos por consumo de drogas están relacionados con el cannabis y los opioides, que son también las drogas que llevan a la mayoría de las personas a buscar tratamiento. Además, los opioides, siguen siendo las drogas más letales. Existen claras diferencias regionales en cuanto a la droga principal declarada por las personas que inician un tratamiento: en la mayor parte de Europa y en la mayor parte de las subregiones de Asia, son los opioides la droga principal más frecuente de las personas que inician un tratamiento. En América Latina es la cocaína, en algunas partes de África es el cannabis y en Asia oriental y sudoriental es la metanfetamina.

El consumo de drogas también es especialmente perjudicial para los jóvenes. En algunas regiones, los jóvenes se ven más gravemente afectados por el trastorno por consumo de sustancias. De hecho, en Sudamérica, más de la mitad de las personas en tratamiento por consumo de drogas tienen menos de 25 años. En África, el 70% tiene menos de 35 años.

Desigualdades, disparidades, salud pública y derechos humanos

La desigualdad y las disparidades sociales y económicas siguen impulsando y siendo impulsadas por el fenómeno de las drogas, amenazando la salud pública y los derechos humanos. Centrándose en el ámbito del tratamiento, el informe de Naciones Unidas arroja luz sobre lo siguiente:

La demanda de tratamiento de los trastornos relacionados con las drogas sigue en gran medida insatisfecha y persisten las disparidades en el acceso. El COVID causa retrocesos en la prestación de servicios

Se calcula que 39,5 millones de personas en todo el mundo sufrían trastornos relacionados con el consumo de drogas en 2021, pero sólo una de cada cinco personas con trastornos relacionados con el consumo de drogas recibía tratamiento, con grandes disparidades entre regiones y en el tipo y la calidad del tratamiento recibido. No todas las formas de tratamiento respetan los derechos humanos ni están basadas en pruebas.

La pandemia de Covid-19 ha agravado la brecha en el tratamiento. La mayoría de los países que comunicaron a la ONUDD datos agregados sobre la administración de tratamiento antes y después de la pandemia observaron un descenso de alrededor del 40% en el número de personas en tratamiento por consumo de drogas entre los períodos 2018-2019 y 2020-2021, con nuevos descensos en el período 2020-2021.

Las mujeres se enfrentan a barreras en el acceso a los servicios de tratamiento

Las barreras en el acceso al tratamiento son múltiples, pero las mujeres son las más afectadas. Las mujeres que consumen drogas tienden a evolucionar hacia trastornos por consumo de drogas más rápidamente que los hombres, pero siguen estando infrarrepresentadas en los servicios de tratamiento. Esta brecha es especialmente alta en el caso de las mujeres que consumen estimulantes de tipo anfetamínico. Casi 1 de cada 2 consumidores de estimulantes de tipo anfetamínico es mujer, pero sólo 1 de cada 4 personas en tratamiento lo es.

En general, las proporciones más bajas de mujeres en tratamiento relacionado con las drogas se dan en Asia y África y las más altas en las subregiones de Australia y Nueva Zelanda, así como en América del Norte.

Las innovaciones en los servicios durante la pandemia de COVID-19 han aumentado el acceso al tratamiento de la drogodependencia para algunos grupos de población

Las innovaciones en la prestación de servicios de drogodependencia incluyeron el uso de la telesalud (por ejemplo, el uso del teléfono y herramientas de comunicación en línea) y de diversas estrategias para garantizar el acceso a la medicación y a material de inyección estéril (por ejemplo, mayor número de dosis para llevar a casa, entrega de medicación o material estéril), entre otras. Están empezando a aparecer estudios que evalúan el impacto de estas estrategias, sobre todo en países de ingresos altos, y hasta ahora los primeros resultados han sido bastante positivos: es más probable que los pacientes sigan en tratamiento, los servicios atienden a nuevos clientes, los pacientes declaran mayores niveles de satisfacción y los programas pudieron ahorrar recursos a la vez que superaban las barreras tradicionales al tratamiento, como el cuidado de los hijos o los compromisos laborales, los problemas de transporte e incluso la estigmatización.

El acceso desigual a los servicios agrava la desigualdad en la prestación de tratamiento

Aunque las innovaciones en la prestación de servicios que se iniciaron durante la pandemia parecen haber reportado beneficios tempranos, sigue habiendo problemas debido a la brecha digital, especialmente en los países de renta baja y en determinadas poblaciones marginadas a las que es difícil llegar, como las personas sin hogar y los consumidores de drogas inyectables.

Otros grupos marginados, como los que tienen antecedentes de encarcelamiento, los desplazados por emergencias humanitarias y los profesionales del sexo, se enfrentan a otras barreras para acceder a los servicios. Además, el consumo de drogas por parte de las poblaciones marginadas puede ser más intenso, lo que las expone a un mayor riesgo de daños continuados, recaídas y otros problemas de salud relacionados.

Interconexión de los trastornos por consumo de drogas y problemas de salud mental

Los trastornos por consumo de drogas y otros trastornos mentales están estrechamente interconectados: los trastornos mentales aumentan el riesgo de desarrollar trastornos por consumo de drogas, y las drogas y otros medicamentos psicoactivos plantean el riesgo de exacerbar los problemas de salud mental si se consumen sin supervisión médica. Se calcula que una de cada ocho personas en todo el mundo padece un trastorno mental diagnosticado, por lo que la necesidad de abordar los problemas de salud mental en la prevención y el tratamiento del consumo de drogas se ha convertido cada vez más en una prioridad.

Las poblaciones desplazadas por la fuerza sufren una elevada vulnerabilidad a los trastornos mentales y por consumo de sustancias que debe abordarse.

A mediados de 2022, el número de personas desplazadas por la fuerza en todo el mundo había superado los 100 millones, lo que suponía más del doble de los casi 43 millones de personas desplazadas por la fuerza una década antes. Es probable que las personas desplazadas por la fuerza sufran niveles elevados de problemas sociales y de salud mental, así como una mayor vulnerabilidad a los trastornos por consumo de sustancias. Entre las poblaciones desplazadas, el inicio o la transición al consumo problemático de sustancias es complejo. El alcance y las pautas del consumo de sustancias no son necesariamente distintos de los de la población general, pero a menudo deben abordarse en el contexto de unas infraestructuras sanitarias limitadas y unos recursos sociales y económicos restringidos. La disponibilidad y accesibilidad de los servicios de salud mental, incluidos los de tratamiento de la drogodependencia, siguen siendo un reto para las personas desplazadas, que pueden verse estigmatizadas y discriminadas a la hora de acceder a los servicios locales.

Posibles respuestas identificadas en el Informe Mundial 2023

Es fundamental reducir las desigualdades y la brecha en el acceso a tratamientos y servicios integrales, con el fin de minimizar las consecuencias adversas tanto sociales como para la salud pública del consumo de drogas. Esto debe ser abordado mediante un proceso continuo de atención a las personas que consumen drogas, especialmente enfocado en las poblaciones vulnerables y marginadas.

Se necesitan iniciativas de prevención del consumo de drogas a gran escala, basadas en la escuela, la familia y la comunidad, con el fin de reducir el riesgo de que aumenten los trastornos relacionados con el consumo de drogas, sobre todo teniendo en cuenta el alto nivel de prevalencia actual de los trastornos mentales. Los grupos socioeconómicos más altos han demostrado una mayor propensión a iniciarse en el consumo de drogas que los grupos socioeconómicos más bajos, pero son estos últimos los que pagan el precio más alto, ya que tienen más probabilidades de sufrir trastornos por consumo de drogas.
Para ser eficaz, el enfoque de la prestación de servicios de tratamiento debe ser voluntario y basarse en los derechos humanos. A medida que el fenómeno de las drogas siga evolucionando, los Estados miembros tendrán que redoblar sus esfuerzos para garantizar el acceso a servicios de calidad que hayan demostrado reducir los trastornos por consumo de drogas, tanto a nivel mundial como nacional y en todas sus subpoblaciones.
La reducción del estigma al que se enfrentan las personas que consumen drogas hará que el tratamiento y las intervenciones sean más accesibles y eficaces para las personas que necesitan dichos servicios. Durante la pandemia se ha avanzado en la reducción de las barreras de acceso a los servicios, lo que ha resultado prometedor para atraer y retener a los pacientes.
Dados los niveles desproporcionados de daños y la gran brecha en el acceso a los servicios que experimentan ciertas poblaciones que consumen drogas de forma más intensiva, es necesario un esfuerzo adicional para diseñar y aplicar políticas y programas que aborden las necesidades específicas de las poblaciones. Es importante adaptar los programas a las personas sin hogar, las y los profesionales del sexo, las personas traumatizadas y otras personas que se enfrentan a obstáculos para acceder a los servicios, como las personas con comorbilidades adicionales de salud mental, las personas encarceladas o excarceladas y las mujeres embarazadas.
Es necesario dar mayor prioridad al abordaje de la salud mental en los esfuerzos por prevenir y tratar los trastornos relacionados con el consumo de drogas. La investigación científica actual y los ensayos clínicos con psicodélicos indican su potencial para tratar algunos trastornos mentales, pero la supervisión médica es un componente crítico para garantizar sus beneficios al mismo tiempo que se limitan los daños.
Considerando el número sin precedentes de personas desplazadas es necesario hacer una inversión mucho mayor en iniciativas de prevención del consumo de drogas y en servicios de tratamiento para minimizar las consecuencias adversas para la salud pública y la sociedad en una atención continuada en contextos humanitarios.
Se necesitan compromisos políticos y financieros para ampliar las intervenciones que abordan las desigualdades estructurales y económicas, las normas socioculturales perjudiciales, las desigualdades de género y la violencia de género que impulsan las epidemias de VIH y hepatitis entre los consumidores de drogas.

 

Las adicciones son problemas muy graves que pueden afectar a personas de todas las edades, desde adultos hasta bebés que son hijos de madres adictas. Se define como droga ilícita a toda aquella sustancia que es capaz de entrar al cuerpo y que además es capaz de alterar una o varias de sus funciones físicas y psíquicas, generando que toda aquella persona que la consuma la vuelva a consumir por el efecto placentero que causa. Además, el consumo crónico de estas sustancias tiene repercusiones importantes en la función cardiovascular. El tipo de complicaciones cardíacas que puede sufrir una persona depende de la droga y otros factores asociados. Estos problemas pueden incluir un deterioro del funcionamiento cardiovascular, alteraciones del ritmo, insuficiencia cardíaca, o incluso la muerte.

El impacto del uso de drogas ilegales en la salud mental: efectos y consecuencias.
El uso de drogas ilegales puede tener efectos negativos significativos en la salud mental de las personas. El abuso de sustancias puede conducir a diversos trastornos de salud mental, como la depresión, la ansiedad y el trastorno bipolar. Las drogas pueden interrumpir el funcionamiento normal del cerebro, alterando la forma en que procesa la información y las emociones. El uso prolongado de drogas puede dañar las vías neuronales del cerebro y reducir su capacidad para producir dopamina, lo que lleva a la depresión y otros trastornos del estado de ánimo. El abuso de sustancias también puede causar ansiedad severa, paranoia y alucinaciones, lo que lleva a un deterioro significativo en la salud mental de la persona.
Además, el uso de drogas ilegales puede provocar problemas de comportamiento, como la irritabilidad, la agresividad y la impulsividad, lo que puede afectar negativamente las relaciones interpersonales de la persona. La adicción a las drogas puede conducir a la pérdida de empleo, problemas financieros, problemas legales y aislamiento social, lo que puede aumentar la sensación de desesperanza y desesperación. En resumen, el uso de drogas ilegales puede tener efectos graves y duraderos en la salud mental de las personas, afectando su capacidad para llevar una vida plena y satisfactoria.

Opio
El opio es un narcótico y analgésico altamente adictivo ampliamente utilizado a lo largo de la historia. Es un extracto de la adormidera o también conocida como amapola real que está compuesto por una serie de alcaloides como la papaverina, la codeína y la morfina. Al igual que la heroína, es un opiáceo, pero en una forma más cruda. El opio procede de la savia de la semilla de la amapola real, y tras exponerse al aire se torna duro y de color marrón oscuro o negro. Tras alcanzar este estado, puede fumarse o ingerirse por vía oral. Al igual que la heroína, genera un alivio de la ansiedad o el dolor y mayor sensación de relajación. Estos efectos suelen durar unas 3-4 horas. El consumo excesivo y prolongado de opio genera tolerancia a la droga y con el tiempo, los efectos secundarios pueden incluir un deterioro de la coordinación, mayor ansiedad, deterioro mental, pérdida de peso, bradicardia, náuseas, deterioro de la visión y estreñimiento. Fumar opio también puede provocar daños a largo plazo en el corazón, los pulmones, el hígado y los riñones. En caso de sobredosis, puede producirse un colapso circulatorio, convulsiones, coma, insuficiencia respiratoria, falla cardiaca y muerte.
• Opio – Pregúntele a Alice, en esta página que ofrecen expertos en salud de la Universidad de Columbia responde a preguntas sobre qué es el opio y cuáles son los efectos/riesgos de consumirlo.
• Opiáceos – Folleto del centro de Ciencias de la Salud de la Universidad Estatal de Luisiana en Nueva Orleans, que explica qué son los opiáceos, sus efectos, riesgos, adicción y tratamiento.
• La relación de la adicción al opio con la enfermedad arterial coronaria (EAC) – Artículo de la Revista Internacional de Medicina Preventiva sobre un estudio realizado en 2010 en Irán el cual demostró que el opio es un factor de riesgo independiente para desarrollar EAC.
• Los efectos del opio en el sistema cardiovascular – Una revisión de la literatura realizada en 2019 que demuestra los efectos secundarios del consumo de opio, así como algunos efectos imparciales o benéficos sobre su consumo..

Heroína
La heroína es una droga derivada del opio que está elaborada a partir de la morfina pero es entre dos y cuatro veces más potente. En sus diversas formas, esta droga puede consumirse por vía intravenosa, inhalarse o fumarse. Sus efectos a corto plazo causan euforia y relajación, que son los que ocasionan que ciertas personas la consuman ilícitamente. Otros efectos a corto plazo incluyen sequedad bucal, bradicardia y bradipnea, deterioro del estado mental, debilidad muscular, infecciones cutáneas y lesiones debidas al uso de agujascomo miositis osificante y cicatrización de las paredes venosas. Aquí hay un recurso valioso para su salud mental.
Los efectos del consumo crónico de heroína incluyen adicción, colapso venoso, abscesos, disminución de la función hepática, insuficiencia renal, así como un mayor riesgo de adquirir infecciones de transmisión hemática, como hepatitis B, C, sífilis y VIH. También suele ocasionar infecciones sistémicas como la celulitis, endocarditis, osteomielitis, neumonía y tuberculosis.
Durante el proceso de desintoxicación, los ex adictos pueden experimentar vómitos, diarrea, mialgias y osteomielitis, lo que puede provocar una recaída si no se trata adecuadamente, además de que el riesgo de sobredosis y muerte por heroína es bastante alto. Es importante destacar que las tasas de mortalidad han aumentado debido al reciente resurgimiento de la popularidad de esta droga en Estados Unidos y en todo el mundo.
• Datos sobre las drogas: Heroína – Página informativa del Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas sobre la heroína. Incluye información sobre qué es, cómo se usa, sus efectos a corto y largo plazo, sobredosis, adicción y tratamiento.
• Heroína – Folleto informativo de la Universidad de Delaware sobre la heroína. Incluye estadísticas sobre el consumo de heroína en los Estados Unidos, efectos a corto y largo plazo, así como las complicaciones médicas debidas al consumo crónico.
• Riesgos para la salud asociados al consumo de drogas ilícitas y alcohol – Página de la Union University sobre los riesgos para la salud de varias drogas ilícitas. La información incluye los nombres alternativos de cada droga, los riesgos y efectos nocivos para la salud.
• Guía sobre las drogas: Heroína – Breve artículo de la Asociación para niños sin drogas para que las familias conozcan los datos sobre la heroína y los signos de su consumo. También ofrece ayuda y apoyo para tratar el abuso de sustancias en los niños
• Efectos dañinos de la heroína en los pulmones – Artículo informativo sobre los efectos de la heroína en los pulmones y las afecciones resultantes que incluyen edema pulmonar, empiema, neumonía y bronquiectasias.
• Efectos del uso de cocaína/heroína sobre la función cardiovascular – Estudio publicado en 2021 que evaluó los efectos del consumo agudo y crónico de heroína y cocaína sobre la función cardiovascular.

Cocaína
La cocaína es un supresor del apetito y estimulante que procede de la planta de la coca, de la que deriva su nombre. La cocaína se suele consumir por vía oral (frotándola en las encías), nasal (inhalación, esnifar o snorting), intravenosa o pulmonar. Cuando es procesada se cristaliza y se le conoce como crack, en estos casos se calienta y se fuma. El consumo de esta droga tiene una gran cantidad de alteraciones a la salud que se enlistan a continuación:
Intoxicación Aguda Uso crónico Cardiovascular
• Efectos fisiológicos: Taquicardia, miosis, diaforesis, náuseas, discinesias, falta de apetito, anorexia.
• Efectos en el comportamiento: comportamientos repetitivos, agitación, disforia, ansiedad, ataques de pánico, paranoia, grandiosidad • SNC: Ictus, deterioro cognitivo, alteraciones del movimiento, cefalea
•Psiquiátricos: Ideaciones suicidas, psicosis,
• Efectos sistémicos: Nefritis intersticial agua, excoriaciones, prurigo, perforación del septo nasal El consumo agudo de cocaína se asocia a una vasoconstricción arterial y a una mayor formación de trombos, y provoca taquicardia, hipertensión, aumento de la demanda miocárdica de oxígeno e incremento de las fuerzas de cizallamiento vascular. El consumo agudo de cocaína se asocia a una serie de trastornos cardiovasculares, como: Isquemia o infarto de miocardio, miocarditis y desarrollo de una miocardiopatía, arritmias, infarto, disección aórtica
• El consumo de cocaína y sus efectos a largo plazo – Artículo informativo del Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas acerca de los efectos a largo plazo del consumo de cocaína.
• Datos sobre la cocaína – Hoja informativa del Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas. Incluye información sobre qué es la cocaína, cómo se consume, cómo afecta al cerebro, efectos a corto y largo plazo, adicción y tratamiento.
• ¿Puede la cocaína afectar el riesgo de presentar insuficiencia cardíaca? – Breve vídeo informativo de National Geographic sobre los ataques cardíacos inducidos por la cocaína.
• Clínica de Rehabilitación de Adicciones Edward Dowling – Establecimiento especializado en adicciones con sustancias psicoactivas. Esta clínica cumple con los requisitos básicos de la NOM-028-SSA2-2009 para la Prevención, Tratamiento y Control de las Adicciones.
• Los efectos cardiovasculares de la cocaína – Una revisión de la AHA que describe la relación entre la cocaína y diversas enfermedades cardiovasculares, así como la evaluación diagnóstica y el abordaje terapéutico.
• Cocaína y el corazón – El consumo de cocaína en los Estados Unidos ha persistido en los últimos años. Asociado a este consumo se han reportado los riesgos de complicaciones cardiovasculares. En este artículo se analizan los efectos de la cocaína sobre el sistema cardiovascular y las opciones terapéuticas disponibles.

Metanfetamina
La metanfetamina es una amina simpaticomimética con diversos efectos estimulantes, anorexígenos, euforizantes y alucinógenos. Se utiliza clínicamente para el tratamiento del trastorno por déficit de atención con hiperactividad (TDAH), el tratamiento a corto plazo de la obesidad y como tratamiento no indicado de la narcolepsia. A nivel fisiológico, los efectos reforzantes de la metanfetamina están mediados tanto por el bloqueo del transportador de dopamina como por la estimulación de la liberación presináptica de dopamina.
En cuanto a vías de administración, reportes indican que la droga se fuma con más frecuencia (68%) o se esnifa (31%), y con menos frecuencia se inyecta (7%) o se ingiere por vía oral (3%), causando sus efectos casi de manera inmediata, penetrando rápidamente en los órganos bien perfundidos, incluido el cerebro, y tiene una semivida de aproximadamente 9 a 13 horas. Además, su uso recreativo se debe a la variedad de efectos que ofrece, como la euforia, el aumento del deseo y la función sexual, la elevación del estado de ánimo, aumento de la concentración, el estado de alerta y disminución del sueño.
Esta droga no sólo reduce el flujo sanguíneo a los órganos vitales y al propio corazón, sino que también acelera el ritmo cardíaco. Es por esto, que las complicaciones cardiovasculares como la hipertensión maligna, las arritmias, la disección aórtica, el infarto de miocardio secundario a vasoespasmo, el ictus y la cardiomiopatía son las principales causas de muerte entre los consumidores de metanfetamina.
Por otra parte, para su uso ilícito, puede sintetizarse mediante reacciones sencillas a partir de sustancias químicas fácilmente disponibles y medicamentos de venta libre para el resfriado, como la efedrina y la pseudoefedrina. Debido a que la metanfetamina ha sido el principal problema de drogas en muchos estados de EE.UU., se puso en marcha la Ley de Lucha contra la Metanfetamina en 2005 para ayudar a reducir su producción limitando la cantidad de medicamentos para el resfriado y la tos que se pueden vender a una persona en un solo día. Del mismo modo, también se exige una receta para el consumo de estos medicamentos, ya que las farmacias deben llevar un registro de las compras realizadas.
• ¿Qué le hace la metanfetamina a tu cuerpo? – Artículo informativo del Instituto Nacional sobre el Abuso de Drogas sobre la metanfetamina y sus efectos a corto y largo plazo.
• Metanfetamina – Hoja informativa del Instituto Nacional sobre el abuso de drogas.
• Ley de lucha contra la metanfetamina de 2005 – Hoja de preguntas y respuestas de la DEA del Departamento de Justicia de los Estados Unidos sobre esta ley.
• Características clínicas y tratamiento de la miocardiopatía asociada a la metanfetamina – Revisión de la literatura sobre los posibles mecanismos patológicos de la metanfetamina, resumen sobre los datos epidemiológicos actuales, así como una guía para el manejo a corto y a largo plazo de estos pacientes.
• Consumo de metanfetamina y enfermedades cardiovasculares – En esta revisión hecha por la AHA, se examina la literatura actual sobre los cambios inducidos por la metanfetamina en la salud cardiovascular, los posibles mecanismos potenciales que regulan estos efectos variados y se destacan las deficiencias en la comprensión de cómo tratar la disfunción cardiovascular asociada a la metanfetamina.

Flunitrazepam
El flunitrazepam o rohypnol es un potente depresor del sistema nervioso central que suele denominarse “droga de la discoteca” o “droga de la violación”. Para su uso médico, es un potente fármaco hipnótico, sedante y amnésico utilizado para tratar el insomnio crónico. Estos comprimidos blancos también denominados “roofies”, son inodoros e incoloros, y pueden introducirse fácilmente en una bebida con el fin de agredir sexualmente a una víctima.
Sus efectos pueden sentirse en cuestión de minutos y pueden durar hasta ocho horas, y la víctima suele recordar poco o nada de lo sucedido. Sus efectos secundarios incluyen, dificultad para respirar, dificultad para hablar, cefalea, vómitos y náuseas, cambios de humor y pérdida de memoria. Una persona bajo los efectos del rohypnol parecerá estar muy borracha y a menudo perderá el conocimiento unas dos horas después de haber ingerido la droga. En casos extremos, el rohypnol puede provocar coma o la muerte. Los efectos a largo plazo de su consumo, para aquellos que la usan de forma recreativa, incluyen la dependencia física y psicológica. Además, al desintoxicarse, el usuario sufrirá síntomas de abstinencia como alucinaciones, confusión, dolores de cabeza y posibles convulsiones.
• Drogas para la violación – Página informativa de la Universidad de Brown sobre las drogas para la violación en citas.
• Drogas para la violación: XTC, Rohypnol, Ketamina – El Centro de Bienestar Estudiantil de la Universidad de Notre Dame ofrece una hoja informativa de preguntas y respuestas sobre estas drogas.
• La verdad sobre las drogas de club o discoteca (PDF) – La Oficina de Programas de Justicia ofrece un archivo en formato PDF para que los padres sepan qué son las drogas de club o la discoteca, los posibles efectos de cada droga y dónde obtener ayuda.
• Enfoque sobre el consumo adolescente de drogas de club y “otras” sustancias – Las drogas de club y “otras” sustancias de abuso se describen brevemente para recordar la gran variedad de sustancias conocidas y desconocidas que consumen los adolescentes, el alto potencial de efectos directos e interactivos del consumo de sustancias que se manifiestan de forma aguda y crónica, y la vigilancia necesaria para anticipar y reconocer los nuevos efectos y las interacciones entre drogas que surgen a medida que se siguen “diseñando”, fabricando y comercializando nuevas sustancias para satisfacer las tendencias de consumo de sustancias.

LSD
La dietilamida del ácido lisérgico, o LSD, es una potente droga alucinógena derivada del cornezuelo de centeno que, cuando se consume, altera la percepción de la realidad. La popularidad del LSD alcanzó su punto álgido a finales de los sesenta y principios de los setenta y ha ido disminuyendo desde entonces, posteriormente fue prohibido por la ley federal de Estados Unidos en 1966.
Actualmente está disponible en forma de tabletas, cápsulas, tiras de gelatina, micropuntos y líquido. Como líquido, se suele añadir a papel secante en formas de colores, y cada forma equivale normalmente a una dosis. Las dosis recreativas típicas son de 25 a 80 mcg y sus efectos psicodélicos duran de 6 a 12 horas. Los efectos psicodélicos del LSD implican la intensificación o distorsión de los estímulos sensoriales y el aumento de los sentimientos y la introspección. Es importante destacar que la mayoría de los alucinógenos producen efectos simpaticomiméticos leves, como taquicardia, hipertensión, midriasis, hipertermia y diaforesis. Además, es frecuente que presenten náuseas y vómitos antes de la aparición de los efectos alucinógenos.
Es infrecuente que el uso recreativo de LSD ocasione síntomas graves. Cabe destacar, que la toxicidad potencialmente mortal, el colapso cardiovascular y la hipertermia, sólo se ha notificado en caso de ingestión de hasta 400 mcg. A largo plazo), provoca episodios de paranoia, psicosis, crisis de ansiedad y depresión, lapsus de atención y memoria, dificultades cognitivas, despersonalización y alteraciones de la conducta.
• Hoja informativa sobre el LSD – Incluye información sobre qué es el LSD, efectos secundarios, efectos en la mente, signos y síntomas de abuso y cómo se usa.
• LSD (Ácido) – Hoja informativa del NIH sobre el abuso de la sustancia LSD. Incluye información sobre los efectos en el cerebro, efectos nocivos, tolerancia, opciones de tratamiento, recuperación y los recursos.

Éxtasis
El éxtasis o MDMA, también conocida como Molly, es un compuesto sintético similar a las anfetaminas y la mescalina. Suele consumirse en forma de pastillas o cápsulas, aunque también se puede inhalar. En términos generales, la MDMA aumenta el estado de alerta, reduce la fatiga y provoca sensaciones de aumento de las facultades físicas, mentales y causa euforia. Asimismo, los usuarios suelen empezar a experimentar los efectos deseados aproximadamente una hora después de su administración oral. A dosis típicas pueden producirse reacciones adversas menores, como agitación, náuseas, bruxismo, ataxia, diaforesis, visión borrosa, taquicardia e hipertensión. Estos efectos suelen ser autolimitados y se resuelven en cuestión de horas.
La intoxicación por MDMA puede causar graves alteraciones al estado general, como hipertensión grave, hipertermia, delirio, agitación psicomotriz e hiponatremia profunda. Las complicaciones potencialmente mortales de estos efectos incluyen hemorragia intracraneal, infarto de miocardio, disección aórtica, coagulación intravascular diseminada, rabdomiólisis, convulsiones y síndrome serotoninérgico. Además, el éxtasis puede estar compuesto por otras drogas, como sales de baño, cocaína, ketamina o medicamentos de venta libre para la tos. En este caso, si se mezcla con MDMA o alcohol, existe un mayor riesgo de muerta.
• Molly – Artículo informativo sobre el control de sobredosis por éxtasis, qué es, sus efectos nocivos a corto y largo plazo, y qué hacer en caso de emergencia.
• Drogas del club o discoteca – Estadísticas y tendencias realizadas por el Instituto Nacional para el Abuso de Drogas, sobre las drogas más usadas en la discoteca.
• Riesgo de enfermedad valvular cardíaca por consumo de MDMA – Artículo informativo sobre un estudio realizado por el NIDA que mostró un riesgo potencialmente mayor de valvulopatía cardíaca en los consumidores de MDMA.
• Infarto agudo de miocardio inducido por metileno 3, 4 dioximetanfetamina – Se trata de un reporte de caso y revisión sobre un joven sufrió un infarto de miocardio tras ingerir MDMA. La angiografía de urgencia reveló trombosis coronaria derecha. La arteria coronaria quedó permeable tras la administración intravenosa de un inhibidor de la glucoproteína IIb/IIIa y una infusión intracoronaria de uroquinasa. Se discutió el infarto agudo de miocardio inducido por MDMA.

Catinonas sintéticas (Sales de baño)
Las catinonas sintéticas, también conocidas como “sales de baño”, son una sustancia psicoactiva similar a la catinona, un estimulante que se encuentra en la planta de khat, originaria de África oriental y el sur de Arabia. El ingrediente más común que se encuentra en las “sales de baño” es la metilendioxipirovalerona, aunque también es frecuente encontrar mefedrona y metilona. Esta sustancia, en forma de polvo blanco o marrón parecido al cristal, se puede fumar, inhalar, inyectar o ingerir vía oral.
Estos estimulantes del sistema nervioso central provocan sensaciones de agitación y aumento de la energía a los 15 minutos de su ingesta, y sus efectos duran de 4 a 6 horas causando un aumento del estado de alerta, locuacidad, sociabilidad e intensa euforia. A dosis más altas provocan distorsiones perceptivas, diaforesis, emesis, taquicardia, hipertensión, hipertermia, cefalea y convulsiones, y pueden dar lugar a alteraciones del estado mental con paranoia, delirios, alucinaciones y comportamiento violento, incluida la automutilación y actividad suicida u homicida. Los efectos cardiovasculares pueden incluir hipertensión y taquicardia, hipotensión, dolor en el pecho, arritmia, e inclusive infarto agudo al miocardio. También pueden producirse efectos a largo plazo, como rabdomiólisis, insuficiencia renal, daño hepático y encefalitis.
• Catinonas sintéticas Hoja informativa del NIDA. Incluye información sobre los antecedentes de la droga, su uso, efectos secundarios, adicción y tratamiento.
• Signos y síntomas del abuso de las sales de baño – Artículo de Narconon sobre los signos y síntomas del abuso de esta sustancia.
• Catinonas sintéticas: Una amenaza doméstica emergente – Informe del Centro Nacional de Inteligencia sobre Drogas del Departamento de Justicia de los Estados Unidos sobre las catinonas sintéticas. Incluye información detallada sobre sus antecedentes, disponibilidad, abuso, producción, distribución, y legislaciones.
• Miocardiopatía reversible grave inducida por las “sales de baño” – Estudio de caso e informe sobre un consumidor de “sales de baño” que experimentó una miocardiopatía grave inducida por las sales de baño.

Fentanilo
El fentanilo es un potente opiáceo sintético, altamente adictivo que es hasta 50 veces más fuerte que la heroína y 100 veces más fuerte que la morfina. Se introdujo en la práctica médica como anestésico intravenoso en la década de 1960. Es un importante factor contribuyente a las sobredosis mortales y no mortales en los EE. UU.
Inicialmente, los informes sobre el abuso de fentanilo fueron escasos en comparación con otros productos opioides de venta con receta, como la oxicodona y la hidrocodona. En cambio, la mayoría de los primeros informes reportaban que el abuso de fentanilo era por parte de anestesiólogos ya que tenían fácil acceso a él. Actualmente, la DEA incluyó al fentanilo así como otros medicamentos similares al fentanilo, como el sufentanilo, el alfentanilo y el carfentanilo, en la Lista II de la Ley de Sustancias Controladas por su un alto potencial de abuso.
Cuando se fabrica de manera ilícita, se puede encontrar como líquido o polvo. Como líquido puede encontrarse como gotas oculares, spray nasal, golosinas de fentanilo arcoíris, etc. En cambio, cuando se produce en polvo suele mezclarse con la heroína, metanfetamina o cocaína, y supone un gran peligro de complicaciones agudas para la salud, incluido el estado comatoso y la muerte.
Tras su consumo puede generar una serie de efectos como felicidad extrema, náuseas, confusión, sedación, aletargamiento, dificultad respiratoria, etc. En caso de que ocasione sobredosis, los pacientes presentan pupilas mióticas, bradicardia, disminución del volumen corriente, reducción de los borborigmos, hipoxia, coma y hasta la muerte.
La evaluación diagnóstica debe de incluir:
• Prueba rápida de glucosa (excluir hipoglucemia)
• Obtener creatina quinasa
• Radiografía de tórax (si la exploración física sugiere lesión pulmonar aguda o aspiración)
• Obtener la concentración sérica de paracetamol (si el opioide se tomó con intención de autolesionarse o combinado opioide/acetaminofén).
Una vez sospechada la toxicidad por opioides las medidas básicas y la terapia antidotal incluyen un manejo inicial centrado en el soporte de la vía aérea y respiratoria del paciente, administración de naloxona, descontaminación gastrointestinal, extracción extracorpórea. También hay que tener en cuenta que varios opioides poseen toxicidades poco comunes que pueden requerir intervenciones específicas.
Por último, hasta la fecha existen avances recientes en el desarrollo de nuevas opciones terapéuticas, como nuevos haptenos a base de fentanilo conjugados con proteínas transportadoras, vacunas anti fentanilo, vacunas conjugadas anti fentanilo/heroína y anticuerpos monoclonales para disminuir el consumo de fentanilo y prevenir la depresión respiratoria inducida por la sobredosis.

Los efectos del consumo de marihuana
La marihuana, también conocida como cannabis, es una droga de uso común con diversos efectos en el cuerpo. Al ser consumida, la marihuana afecta al corazón y al sistema cardiovascular de varias formas. El compuesto psicoactivo principal de la marihuana, delta-9-tetrahidrocannabinol (THC), interactúa con los receptores cannabinoides del cuerpo, incluyendo aquellos presentes en el sistema cardiovascular. Los efectos inmediatos del uso de marihuana pueden incluir un aumento en la frecuencia cardíaca, elevación de la presión arterial y dilatación de los vasos sanguíneos. Estos efectos pueden durar varias horas después del consumo. Mientras los efectos a corto plazo suelen ser leves y transitorios, el uso crónico de marihuana o dosis altas pueden plantear riesgos para el corazón. Algunas investigaciones sugieren que el consumo de marihuana puede aumentar el riesgo de eventos cardiovasculares, como ataques cardíacos o accidentes cerebrovasculares, especialmente en personas con condiciones cardiovasculares preexistentes. Sin embargo, se necesitan más estudios para comprender completamente los efectos a largo plazo de la marihuana en la salud del corazón. Es importante tener en cuenta que los efectos de la marihuana pueden variar según factores individuales, como el método de consumo, la dosis, la frecuencia de uso y la salud general.

American Heart Association, “Marihuana y salud del corazón” (https://www.heart.org/en/healthy-living/healthy-lifestyle/quit-smoking-tobacco/marijuana-and-heart-health)

26 de junio: Día Internacional de la Lucha contra el Uso y el Tráfico Ilícito de Drogas.

26 de junio: Día Internacional de la Lucha contra el Uso y el Tráfico Ilícito de Drogas.

Este año, la campaña Dianova International quiere concienciar sobre el estigma que afecta a las mujeres con problemas de adicción que, a menudo, tienen dificultades para acceder a los servicios de atención; De hecho, aunque es cierto que más hombres que mujeres usan sustancias, las mujeres están significativamente subrepresentadas en los programas de tratamiento.

🎀 En 2015, las Naciones Unidas estimaron que si bien una de cada tres personas que usan drogas es una mujer, solo una de cada cinco personas en tratamiento por problemas de adicción es una mujer. Varios factores contribuyen a esta desigualdad: las mujeres a menudo ingresan a la atención más tarde debido al contexto familiar, el estigma que rodea el problema de la adicción y la invisibilidad de su consumo de sustancias. Como resultado, su problema de adicción se convierte en una condición crónica y más grave en el momento en que acceden al tratamiento.

💃 Debemos esforzarnos por lograr un enfoque más inclusivo y equitativo de los servicios de adicción. Al eliminar las barreras de género, podemos garantizar que las mujeres reciban apoyo oportuno, reduciendo las consecuencias a largo plazo del uso de sustancias. Juntos, podemos crear una sociedad donde todos tengan el mismo acceso a los servicios de adicción.

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